Parque Frida Kahlo

El Parque Frida Kahlo es un parque público gratuito inaugurado en 1984. Por un tiempo, no fue más que un terreno baldío utilizado para subastas de ganado. Más tarde albergó una fábrica textil. La idea de homenajear a una de las gigantes del arte mexicano surgió a principios de la década de los ochenta, precisamente cuando su reputación estaba alcanzando la fama universal.

Hoy el parque no permite bicicletas ni patinetas. Como resultado, es uno de los parques más tranquilos de la zona. Aunque el Barrio de la Concepción que lo rodea puede estar animado los fines de semana, aquí es más probable que encuentres un jardín de esculturas contemplativo. Diseñado cuidadosamente, incluye un área de juegos para niños y muchos senderos para pasear.

Las tres esculturas: la de Frida Kahlo y Diego Rivera, la figura de Frida sentada y la mujer en el centro de la fuente, son del escultor mexicano Gabriel Ponzanelli, quien vivió con los Kahlo durante un mes a los ocho años de edad, enviado por su padre, quien también era escultor. Kahlo compró uno de sus primeros dibujos al final de esa visita. Actualmente, Ponzanelli es recordado por crear la Fuente de los Coyotes en el Jardín Centenario.

Es un parque cerrado que ocasionalmente es anfitrión de la Feria del Tamal de Coyoacán, aunque normalmente está alejado de lo ajetreado. Un tributo a la artista que dominó la autoexploración, es un lugar apropiado para la introspección. A pocas cuadras de la Capilla La Conchita, es una parada excepcional en cualquier paseo por el barrio.

Horario: lunes a viernes de 7:00 a 18:00 horas.