El Barrio de San Lucas

San Lucas Tlaxopa es uno de los pocos Barrios Originarios de Coyoacán. A sólo unas cuadras del famoso y querido Barrio de la Conchita, San Lucas recibe una fracción de los visitantes. Es una lástima, ya que es un lugar muy similar, de calles sinuosas bordeadas de árboles y un encanto abrumador.

Dependiente durante mucho tiempo del antiguo altepetl de Coyoacán, se cree que el antiguo barrio recibió un impulso con la construcción en el siglo XVI de la pequeña capilla que vemos hoy. Esa capilla mayor se construyó por orden de Hernán Cortés en lo que entonces era una zona de maizales y pastos para el ganado. La iglesia es, por supuesto, el centro neurálgico del barrio. Pero San Lucas tiene la suerte de que sus sinuosas calles también alberguen la antigua capilla circular de Manuel Gutiérrez Zamora y la Fuente de San Miguel, al otro lado del, ciertamente, no muy grande barrio. Tanto la fuente como la capilla circular aparecen en la foto de arriba.

Hacia 1926 se inauguró la autopista México-Coyoacán. La concurrida avenida Hidalgo estrenó pavimento. Y una línea de tranvía conectó el Centro de Coyoacan con gran parte del resto de la Ciudad. Como resultado, los pueblos aledaños se integraron a la nueva “delegación” (hoy es la Alcaldía). Tanto Los Reyes como el Barrio de la Conchita se convirtieron en barrios de la delegación y San Lucas pronto siguió su ejemplo.

Hoy San Lucas es famoso por albergar el Hospital de la Ceguera, una de las mejores instalaciones de la Ciudad de México para la salud visual y servicios para ciegos. Pero quizá sea más famosa por sus calles empedradas. Están salpicadas de pequeñas plazas, algunas de ellas meros rincones. Y con un trazado de calles muy irregular basado en sus propios caminos antiguos, es un lugar maravilloso para perderse y, del mismo modo, para encontrarse.

Los “Arcos” de la foto de arriba se encuentran en la calle Vicente García Torres. Están a unos diez minutos a pie hacia el este desde la Plaza de La Conchita, y justo después del Parque Frida Kahlo.