La Plaza Comercial Pino Suárez rodea el área sur del Metro Pino Suárez. Puede parecer el escenario sonoro de un festival o una aglomeración de comercios callejeros. La entrada norte a menudo alberga eventos musicales en la plaza del Jardín San Miguel. Para aquéllos que no lo conocen, éste es un mercado gigante, principalmente de ropa, calzado y moda. A ambos lados de los niveles superiores hay un par de terrazas, que incluyen buenos lugares para tomar un café, pero con asientos compartidos entre algunos restaurantes más pequeños.
Muchos de estos complejos comerciales se construyeron, como es el caso de los primeros mercados de la Ciudad de México, en un esfuerzo por despejar las calles de vendedores informales. Esta plaza no es la excepción. Surgió en 1993 cuando la ciudad construyó algunos otros, la mayoría en el Centro Histórico. En ese momento, muchas de las calles estaban intransitables debido a los puestos y vendedores semipermanentes que obstruían el paso.
Pero el sitio de esta plaza también la convierte en un monumento. Su origen no es un motivo de orgullo del que la gente esté ansiosa por hablar, es un motivo de gran dolor y pérdida.
Hoy, la Plaza Comercial Pino Suárez se encuentra en el sitio de un antiguo complejo de cinco torres que alguna vez se conoció como el Conjunto Urbano Pino Suárez. El complejo fue construido en 1970. Poco común en la Ciudad de México, dependía de estructuras de acero para soportar cinco torres. Estos incluían tres torres de 22 pisos y dos de 15. Compartían tres pisos en la parte inferior y se integraban con la estación de Metro y un área comercial común. Estaban ocupados casi en su totalidad por oficinas gubernamentales.
En septiembre de 1985, una de las torres de 22 pisos se derrumbó encima de la torre más corta contigua. La devastación resultante causó muchos muertos y heridos. Las tres torres restantes sufrieron daños irreparables. Éstas fueron demolidas a finales de ese año.
Los escombros se habían limpiado recientemente cuando comenzaron las obras de la nueva Plaza Comercial Pino Suárez en 1993. Desde entonces, se ha convertido en un distrito de moda en el distrito centro-sur del Centro Histórico. Es una experiencia más organizada y sobria de lo que cabría esperar en la plaza que la rodea. Todavía se llena de gente que va y viene, comprando y vendiendo. Quienes sientan afinidad por las tallas mexicanos seguramente apreciarán la variedad de lo que está disponible.
No te pierdas los otros sitios en la Plaza San Lucas, justo al este de la Plaza Comercial. Estos incluyen la Capilla de Santa María Magdalena y la Capilla original de San Lucas.
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