Laboratorio Arte Alameda (Pinacoteca Virreinal, Ex-convento de San Diego)

El Laboratorio Arte Alameda (LAA) se encuentra en su casa, en una iglesia amarilla situada en el extremo oeste de la Alameda Central. Dedicado a la exhibición, documentación, producción e investigación de la práctica artística en diálogo con la tecnología, es uno de los principales espacios de arte contemporáneo de la ciudad. Aunque su reputación es la de centrarse principalmente en instalaciones de videoarte, un vistazo a sus exposiciones pasadas mostrará que no siempre ha sido así.

Enfocado en obras creadas específicamente en el espacio, el LAA también apoya a artistas nacionales e internacionales. Los numerosos programas fomentan la reflexión y el intercambio de ideas entre el público y a través de la comunidad de medios electrónicos en México y en todo el mundo.

El LAA también presenta proyectos, curatoriales y artísticos, para investigar la intersección del conocimiento y las prácticas museísticas contemporáneas. El LAA abre sus puertas a todos los públicos que quieran explorar, con especial interés en las comunidades desatendidas o vulnerables. Como institución, el LAA también ha trabajado para formar alianzas y colaborar con actores en las cuatro tareas fundamentales: exposición, documentación, producción e investigación.

Al ser un edificio muy visible en el borde de la Alameda, es un lugar perfecto para pasar por allí. Las exposiciones suelen estar abiertas durante un periodo de meses, varias veces al año, y la página de Facebook de la Pinacoteca Virreinal publica los eventos a medida que se producen.

La Pinacoteca Virreinal de San Diego

El actual Laboratorio ocupa la antigua Pinacoteca Virreinal de San Diego. Ésta fue un museo desde 1964 hasta el año 2000. Estaba dedicado a la pintura producida en la Nueva España, desde el siglo XVI hasta el XIX. La colección se trasladó al Museo Nacional de Arte en el año 2000.

La iglesia formaba parte originalmente del Monasterio de San Diego. Éste fue fundado en 1591 en lo que había sido el tianguis de San Hipólito. Para 1682, el monasterio albergaba a 60 hermanos. El área frente al convento es famosa por haber sido el lugar de las ejecuciones realizadas por el Santo Oficio de la Inquisición. Esto tuvo lugar en la Nueva España hasta 1771, cuando se amplió la Alameda.