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Iglesia de Santiago Apóstol, Iztacalco

A pesar de su aspecto antiguo, la iglesia de Santiago Apóstol data del año 1953. La primera piedra se colocó en honor a Santiago Apóstol, pero son las otras piedras las que hacen que esta iglesia sea significativa.

A finales de la década de 1950, la Ciudad de México había decidido que sus cerros eran más importantes que todos los revestimientos. El tezontle se había extraído durante siglos, principalmente de volcanes extinguidos. La fuente de toda esa roca distintiva, porosa y de color rojo sangre, se utilizó para la fachada del Santiago Apóstol y la convierte en una de las últimas iglesias así revestidas. El tezontle confiere a la iglesia una edad muy superior a la que realmente tiene.

Realzado al menos una vez al año por el gran arco de entrada florido, el edificio puede parecer más antiguo, aunque no menos distinguido. Está justo al final de la calle de otros lugares religiosos notables de Iztacalco, pero no debería quedar fuera de un recorrido local a pie. A poca distancia se encuentran:

De hecho, cualquier paseo por el curiosamente torcido, a menudo antiguo y generalmente indescriptible centro de Iztacalco va a ser ricamente recompensado. Con un interior luminoso, vidrieras y bancos cuidadosamente tallados, cientos de otros detalles hablan de una iglesia bien cuidada. El interior es más refrescante y nuevo que la fachada.

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