La Iglesia de San Luis Obispo de Tolosa es la iglesia parroquial de San Luis Tlaxilatemalco. Fue construida por el franciscano Alonso de Paz Monterrey, alrededor de 1603. Era entonces una capilla de visita de la Catedral Franciscana de Xochimilco, visitada para una misa cada 15 días.
El edificio se inició como ermita en 1586, pero 1603 marca el inicio de la construcción formal. Esta fue luego reconstruida en 1897 y permanece hasta el día de hoy. Se dice que los franciscanos buscaron el apoyo de un grupo de empresarios franceses para los costos de construcción. Así, eligieron a un franciscano francés como patrón del pueblo. San Luis, obispo de Toulouse (1274-1297), quien murió a los 23 años tras haber trabajado por los pobres de esa ciudad.
Las pinturas anónimas de San Luis Obispo y San Sebastián Mártir son particularmente importantes para las colecciones de esta parroquia; también son inusuales para lo que más bien era una iglesia franciscana pobre. Un cuadro de San Luis de Francia de 1753 está firmado por Isidro Meunillo.
Durante la Revolución Mexicana, fueron robados todos los utensilios sagrados de la iglesia, incluida una custodia, un cáliz, una escultura y una pintura de Nuestra Señora de Guadalupe. Hoy en día, el atrio permanece notablemente intacto, sirviendo como una especie de espacio cívico para el pueblo. Por eso, compite bastante directamente con el Centro de Cultura Ambiental Acuexcomatl, que generalmente es más visitado por personas que vienen de fuera.
Pero la Iglesia de San Luis Obispo sigue siendo el hito más destacado en el centro del poblado, pues es el núcleo de una maraña de calles antiguas y maravillosamente torcidas y de una historia que todavía se está escribiendo hoy.
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