La iglesia de Cristo Rey y Santa Mónica, en la colonia Anzures, es la única obra religiosa en la que trabajó el arquitecto Mario Pani. Su visión es tan predominante en la Ciudad de México, sobre todo en lo referente a la arquitectura residencial, que el haber hecho una iglesia es casi una anomalía en su trayectoria.
La iglesia fue encargada por los agustinos en 1942 y su construcción la terminó el constructor Ciro Gutiérrez Pichardo, arquitecto e ingeniero, en 1947. El tejado serrado de cemento armado inunda de luz el interior. El historiador Iván San Martín señaló que este tipo de techos sólo se veían en los edificios industriales en la década de 1940.
El proyecto preveía originalmente un pequeño jardín lateral, en lugar de un atrio. Aquel se perdió posteriormente con la ampliación de la iglesia, pero la fachada lo compensa con un relieve de la Última Cena realizado por el escultor chihuahuense Armando Quezada Medrano.
Se encuentra justo debajo de la monumental celosía de hormigón prefabricado. Un dibujo original incluía un grupo escultórico gigante de Fe, Esperanza y Caridad de unos treinta metros de altura, sin embargo, éste nunca llegó a ser completado.
En el interior, la nave rectangular alcanza una altura asombrosa. El altar está orientado al noroeste y no sigue ningún plano tradicional. El enorme crucifijo es obra del artista jalisciense Brígido Clemente Ibarra González.
Fuentes citadas en esta página:
Iván San Martín Córdova, 2016, Estructura, abstracción y sacralidad,
Cercano a 0.22 kms.
Cercano a 0.38 kms.
Cercano a 0.39 kms.
One of Coyoacán best-known 20th-century masterworks . . .
A startling mid-20th century modernist work expands over Xotepingo . . .
One of the most distinguished of 20th-century neighborhood churches.
La estrella de la arquitectura oriental de Azcapotzalco.
Una de las primeras iglesias cilíndricas, ésta destaca en Verónica Anzures.