La Iglesia de la Inmaculada Concepción es una de las célebres iglesias modernistas del arquitecto Alberto González Pozo. Construyó cuatro iglesias en Coyoacán en la década de 1960. Una quinta le siguió en 1983.
Aquí, en la Colonia El Reloj, Pozo comenzó con un terreno esquinero. Primero se construyó una pequeña capilla rectangular en la parte trasera del terreno. El diseño de Pozo preveía un tejado cónico en dos alturas diferentes e iluminación central. La nave principal de la iglesia está cubierta por tres paraboloides hiperbólicos de hormigón vertido. Éstos descansan sobre un anillo de compresión sostenido por columnas. El interior resultante parece inundado por una atmósfera luminosa.
Gran parte de esta atmósfera la proporcionan las prolíficas vidrieras. José Reyes Meza las diseñó en la década de 1960 específicamente para este espacio.
Quizá el rasgo más singular de la iglesia sea el campanario, con un ángulo espectacular. Sobresale por encima de la entrada al solar y aporta presencia y visibilidad a un templo que, de otro modo, sería discreto.
La iglesia de la Inmaculada Concepción no se terminó hasta 1984. Para entonces, la Colonia El Reloj estaba sólidamente establecida como comunidad de clase media. Es un barrio más nuevo, justo entre dos asentamientos originales. Santa Úrsula Coapa se encuentra directamente al sur. La mayor parte de El Reloj eran antiguas tierras de cultivo de esa comunidad. Al norte inmediato está San Pablo Tepetlapa.
La iglesia está a sólo unos minutos a pie pasando el Mercado El Reloj y aún a sólo unos 5 minutos a pie de la estación Registro Federal del tren ligero.
Cercano a 0.18 kms.
Cercano a 0.21 kms.
Cercano a 0.41 kms.
The most spectacular modernist church in the Jardín Balbuena
La construcción se inauguró en enero de 1967 y se ha convertido en un centro de oración para los vecinos de la zona.
A circular modernist church on the heights over Álvaro Obregón . . .
A modernist church in a giant 20th century neighborhood . . .
A modernist triumph and neighborhood church in Espartaco, Coyoacán . . .